POR MARCO ANTONIO FLORES**
Fausto Alzati Araiza, efímero secretario de Educación Pública y cuasi director general de Petróleos Mexicanos (Pemex). Más conocido por protagonizar dos escándalos en la SEP.
Falleció el 17 de junio de 2020. Pocos medios mencionaron su deceso. Vale la pena recordar algunos pasajes de su vida pública que se encuadra en anecdotas de la vida política nacional. Merecen ser contadas para los que creen en la fortuna y el “infortunio político”, a veces por el azar, a veces producto de la traición, la infamia y también por omisiones y malas decisiones personales.
Para quienes no lo conocieron, parecería que hablar de alguien ausente resultaría ocioso, pero es bueno resaltar que dio buenos resultados en los puestos públicos que tuvo y con importantes aportaciones.
Ha sido el mejor director del Conacyt, así lo reconoció la comunidad científica en su momento. Los logros en favor de la investigación científica y el desarrollo tecnologico son innegables.
Programas innovadores como el Pacime, el “Padrón de excelencia “ para otorgar becas en las mejores universidades del mundo, a través de comités, quitando la discrecionalidad en la asignación de las mismas; creación de los primeros fondos, la IC y DT; creación de las “Catedras de Excelencia” con los mejores especialistas del mundo en los posgrados mexicanos; el diseño del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) como funciona hasta la fecha con niveles I, II y III; fortalecimiento de los Centros SEP-Conacyt, como el CIDE, el CIATEQ, CISESE, CIMAT, etc.
Por si lo anterior fuera poco, también la creación del Sistema Regional de Centros de Investigación; firma de convenios en la materia con paises clave, incluida Cuba en materia de biotecnología, y Japón, Corea del Sur y Singapur en innovación tecnológica… y otros programas que se han ido eliminando, sobre todo a últimas fechas, como el de “Repatriación de cerebros”.
PROMOTOR DEL ‘CRECIMIENTO ECONÓMICO’
Fue un obsesionado promotor del tema “Crecimiento Económico”. A través de un grupo “Teotihuacan” que creó al efecto, logró conclusiones y documentos valiosos desde hace 25 años sobre los factores que dieron pie al vertiginoso crecimiento de los “Tigres asiáticos”: China, Corea del Sur, Hong Kong (independiente) y Singapur.
Su tesis de doctorado, que es un estudio del tema en 12 paises durante 100 años, prueba con rigor científico las principales variables para lograr el crecimiento económico de acuerdo con las condiciones de diferentes paises, merecía y merece haber sido publicada.
También desde esos años, los 90s, era invitado por British Petroleum a dar conferencias internacionales en Londres sobre las pespectivas del petróleo en el mundo. Fueron Fausto Alzati y el brillante Joaquín Lozano quienes trajeron a México el esquema inglés de las inversiones público-privadas, los famosos PPS’s que después se convirtieron en Ley, cuando ambos tenían a su cargo la Secretaría Ejecutiva de Proyectos de Infraestructura de la Presidencia en el sexenio de Vicente Fox Quesada.
Experto en la técnica de “Escenarios”, anticipó la primera alternancia politica del año 2000 en México, de ello hay testimonio en sus editoriales de El Universal.
Para quienes compartimos vivencias y anecdotas con él, es aleccionador recordar al amigo y mentor. Singular personaje que se autodefinía como budista, guadalupano, masón, santero y ateo.
Dotado de genio, superior inteligencia y gran sentido del humor. Elitista y elegante rayaba en la soberbia, al tiempo que se decía hijo del pueblo. Cantaba la Internacional en italiano, la novena en alemán. Fan de Malher en la música y de Steve Jobs en la innovación.
Recitaba completas la “Suave patria” de López Velarde y “Muerte sin fin” de José Gorostiza. También cantaba los corridos de José Alfredo Jiménez y las canciones de Chava Flores. Muy intenso y apasionado en la política y en el amor. Culto y alburero. Denostado, repudiado, admirado y traicionado.
AMIGOS Y ENEMIGOS
Entre sus amigos que lo apreciaron y ayudaron: Fidel Castro, Vicente Fox, Luis Donaldo Colosio, David Ibarra, Ignacio Pichardo, Manuel Bartlett, Emilio Chuayffet, Fernando Pérez Correa, Pascual García de Alba, Eduardo Sojo, Jorge Castañeda, Alfredo Phillips, Fernando Solís Cámara, Víctor López, Diódoro Guerra, Dante Delgado, Miguel Reyes Razo, José de Jesús Vieyra, Julio César Sánchez, Luis Alvidrez y Alfonso Galindo.
Entre los que lo denostaron y traicionaron Ernesto Zedillo, Esteban Moctezuma, Luis Téllez, Elba Esther Gordillo, Juan Enríquez Cabot, Luis Ernesto Derbez, Ramón Muñoz, Carlos Rojas, Gustavo Lomelí, Roberto Calleja.
Y los que además lo defraudaron: Fernando Manzanilla (papá del político poblano), Luis Miguel Niño de Rivera (su ex socio en Cubacel, no el de la AMB) y Bruno Ferrari, homónimo del ex secretario (un argentino fanfarrón).
ANÉCDOTA POLÍTICA
Entre las anécdotas de la vida política nacional en las que participó Fausto Alzati se dio una que trae a colación a dos personajes muy actuales: Andrés Manuel López Obrador y Esteban Moctezuma Barragán.
Los comicios para la gubernatura de Tabasco se habían realizado el 20 de noviembre de 1994, diez días antes de que tomara posesión Zedillo Ponce de León como presidente de la República.
En enero de 1995 Roberto Madrazo fue a visitar al “todavía” secretario de Educación, cuya renuncia ya parecía inminente, Fausto Alzati, su amigo y ex colaborador en el MNJR, para comentarle que el Presidente Zedillo le había ofrecido la SEP a cambio de reconocer a Andrés Manuel López Obrador como ganador de la gubernatura de Tabasco.
Madrazo le dijo a Alzati que la propuesta se la había hecho el secretario de Gobernación, Esteban Moctezuma, en nombre del Presidente. Roberto Madrazo dijo que no aceptaría esa propuesta y se quedó a gobernar Tabasco luego de echar del Palacio de Gobierno a los simpatizantes de AMLO que lo tuvieron tomado algunas semanas.
POLÍTICO Y TECNÓCRATA
Alzati Araiza a los 18 años de edad era dirigente juvenil en su natal Guanajuato. Por su desempeño, Roberto Madrazo, dirigente juvenil nacional del PRI, lo invitó al Comité Nacional. Fue subdirector del IEPES con Colosio, quien lo puso como orador en la plenaria de la XIV Asamblea Nacional, con la presencia de Carlos Salinas de Gortari y todo su gabinete.
En su faceta de tecnócrata, el doctor por la Universidad de Harvard protagonizó gran escándalo al inicio del sexenio de Ernesto Zedillo. Tuvo que renunciar a 54 días de haber sido designado secretario de Educación Pública al hacerse público que “se decía doctor y no lo era”, pues no tenía el grado.
En medio de los ataques mediáticos, su trayectoria académica fue distorsionada. Había estado seis años realizando sus estudios de maestría y doctorado en la escuela John F. Kennedy de Harvard University. Tuvo una estancia destacada, llegó a ser colaborador adjunto del célebre politólogo Samuel Huntington.
Para obtener el grado de doctor elaboró una tesis sobre el tema de “Energéticos” y tuvo colaboraciones con destacados especialistas, como Daniel Yergin, autor de “The Prize”, obra sobre la historia del petróleo, reconocida mundialmente.
En este libro el Dr. Yergin cita a Fausto Alzati en cuatro ocasiones. Esa primera tesis no la presentó, ya que se regresó a México a trabajar en Nafinsa, después se fue a la Secretaría de Programación y Presupuesto como coordinador sectorial en Ciencia y Tecnología, invitado por Pascual García de Alba, quien era calificado por Zedillo como “el mejor macroeconomista de México”, creador de los famosos “Pactos Económicos Nacionales” y quien lo presentó con Ernesto Zedillo a la sazón secretario.
Ahí, en 1989, Fausto diseñó y presentó el primer Programa de Apoyo a la Ciencia en México (Pacime). En enero de 1990, Carlos Salinas lo nombró director general del Conacyt.
EL DESTROZO MEDIÁTICO CONTRA ALZATI
En enero de 1995, a mes y medio de ser designado titular de la SEP por el presidente Ernesto Zedillo, fue destrozado por los medios de comunicación, empezando por el periódico “Reforma”, cuando Elba Esther Gordillo y Manuel Camacho tenían intereses e influencia editorial en ese periódico.
Juan Enríquez Cabot fue quien hizo la primera filtración de la falta del grado académico de Doctor de Alzati, ya que él también tuvo una estancia en Harvard y allá obtuvo la información.
El detonador fue una conferencia de prensa en la que se desbordaron las respuestas de Alzati. Se supo después que la reseña de esa conferencia fue puesta en el escritorio del presidente Zedillo al otro día, nada menos que por su jefe de la oficina presidencial, Luis Téllez. Al día siguiente Ernesto Zedillo pidió a Alzati su renuncia como secretario de Educación.
Luego de ser renunciado en la SEP, Fausto regresó a Boston a vivir como estudiante durante un año. Elaboró una segunda tesis para obtener el grado de doctor. Esta vez el trabajo fue un análisis sobre “100 años de crecimiento económico de doce países”.
En 1997, con su grado y tesis en la mano, quiso ver al presidente Zedillo, quien ya nunca lo recibió. Fue rescatado por Ricardo Salinas como asesor en sus corporativos. Ahí estuvo hasta que su paisano, el gobernador Vicente Fox, se enteró del trabajo de tesis de Alzati y anunció a la prensa que abriría un Centro de Estudios para el Crecimiento Económico en Guanajuato que dirigiría el doctor Fausto Alzati.
Por ello, ese mismo día le hablaron de Los Pinos a Ricardo Salinas, para pedir que Alzati renunciara a su empleo en su corporativo.
Al triunfo de Vicente Fox, Alzati fue designado en el equipo de transición como coordinador de “Energía”. Ahí tuvo que lidiar contra los celos de Luis Ernesto Derbez, quien era el asesor de Fox en materia económica y no le gustaba la cercanía con su jefe.
Fox Quesada había tomado de la tesis doctoral de Alzati la bandera de que México crecería al 7 por ciento. A mediados de la transición, el presidente electo le anticipó a Fausto que sería designado director general de Pemex.
Todo estaba listo: Alzati se había reunido con Rogelio Montemayor para ver los detalles de la entrega de Pemex, incluso se realizó la “entrega virtual” de la Secretaría de la Contraloría. Sin embargo, el 22 de noviembre de 2000 fue designado director general de Pemex Raúl Muñoz Leos, ex director de la empresa Dupont y ex jefe del poderoso “ranchero” Ramón Muñoz y del protagonista del “Toallagate” Carlos Rojas, quienes al final convencieron a Fox de que era mejor opción que Alzati.
En algún momento Fausto los había calificado como “mochos santurrones”. Pagó caro sus ofensas, se metió con el círculo más cercano: Derbez, Rojas y Muñoz.
Francisco Gil Díaz, recién designado secretario de Hacienda, en ese tiempo amigo de Alzati, lo rescató y lo nombró director general de la Aseguradora Hidalgo. El encargo fue preparar la aseguradora para su venta, lo que cumplió con creces. En dos años, puso a la empresa en números negros con utilidades que nunca antes había tenido. La venta la opero la SHCP.
La última incursión de Fausto en el sector público fue en 2013. El secretario de Educación, Emilio Chuayffet -su amigo-, lo designó director general de Televisión Educativa.
En ese entonces Alzati ya mostraba cambios en su carácter. Se volvió malhumorado, agresivo y hasta grosero, se dice que por secuelas que le quedaron después de una embolia cerebral que sufrió en 2002.
LA TRAMPA PARA OTRO ESCÁNDALO
El 13 de junio de 2014, protagonizó otro escándalo en la SEP-DGTVE, cuando en estado de ebriedad y profiriendo groserías, interrumpió la lectura de un poema por considerar que ofendía al presidente Enrique Peña Nieto durante el evento inaugural de la exposición pictórica de la muralista mexicana Aurora Reyes, celebrado en las instalaciones de Televisión Educativa.
Fausto “se puso de pechito”, había caído en la trampa: Gustavo Lomelín -entonces director de Noticieros de DGTVE- grabó todo con las cámaras y equipo de la televisora. Él mismo se encargó de llevar a Los Pinos a Roberto Calleja el video y el audio, así como de filtrarlo a la prensa y a las redes sociales. Lo demás es historia. Las redes y algunos medios de comunicación lo acabaron. Televisa le dio más tiempo a la nota que a alguna noticia sobre cualquier secretario de Estado. Se recuerda la burla que le dedicaron Brozo y Loret de Mola, por instrucciones de su jefe Leopoldo Gómez, quien por encargo de su ex jefe Luis Téllez acabó mediáticamente con Alzati.
Sean las anécdotas narradas una muestra de que en política y en la vida, los errores y la soberbia se pagan. Un clasemediero “aspiracional” que se esmeró en la preparación, comprobó que no sirve de mucho. Sólo se recuerda lo negativo y escandaloso. El escarnio del árbol caído es una práctica común.
En los últimos años Fausto tuvo muchas carencias económicas. Deteriorado en su salud, fue echado de su casa por una deuda hipotecaria (Ferrari). En suma, tuvo una azarosa vida política y personal.
En los últimos tiempos se dejó llevar por el infortunio. Víctima de la maldad, la infamia y la traición. También por excesos y decisiones personales equivocadas.
Su personalidad, capacidad, preparación e inteligencia apuntaban para realizar algo grande para su país, pero hizo lo que pudo o lo que le correspondía hacer.
** Consultor y Académico.
